28.1.08

Shortbus ...::"Like the sixties but without the hope"::...



Todo domingo es inclemente. Si no se esta armado de un buen stack de discos bajados por escuchar, se puede recurrir a las peliculas rentadas que tienen más retraso en la devolución que la hipotecas del error de diciembre. Hoy vi que no había devuelto Shortbus de Cameron Mitchell. Hay peliculas que creo no sabría como afrontar con alguien más. Debido a que casi todo el cine lo veo en solitario no creo tener algo ensayado para situaciones como Shortbus. Así es, no es una pelicula, es una situación. Shortbus es un reencuentro con el cine que no me había dado un orgasmo hace mucho. El cine privado que me hace pensar que el amor convive en la sala más pequeña o en el diafragma de un fotógrafo ante los escrúpulos nulos de un suicida.

Hay que verla y hay que verla en desnudez. Las máscaras son el tema de Mitchell; para Hedwig nos pone un traspie seguido de otro, en Shortbus nos revela un incesante mundo de la piel como la faceta ulterior, la piel es la última parada de las caretas escénicas. Si uno no se visualiza grabando(se) es que falta un contacto que la película se permite; la nota suicida pasó de post-it a youtubazo. La extracción de jugos para dejar al espectador seco y sin tapujos de lo que puede ser un apagón de 100 minutos, la intermitencia de la sinfonía consciente para penetrar en el exquisito ambar de la masturbación y la epifanía. Un sexo incontrolablemente iluminador, digno de una banca de parque que une a toda Nueva York en una polaroid tomada en algo que no es una vida sino un platillo amargo tras otro. Shortbus es un flan de lágrimas, sudor y semen.


2 comments:

Lady Vendetta said...

jajaja un flan, y vaya que es una buena manera de llamar a esta pelicula en la que los placeres de la carne salen a relucir en una sociedad neoyorquina tan actual, tan sesentera, tan eterna.

Anonymous said...

yo tengo fotos así.
pintura comex y todo.
te quiero.

i found you in summer,
when you were undercover.